Son todos aquellos estudios de laboratorio que sirven para detectar padecimientos comunes. Con un menú muy amplio de más de 900 estudios de rutina, podemos detectar desde un embarazo, hasta enfermedades como el síndrome metabólico, problemas cardíacos (enfermedad cardiaca coronaria, infarto al miocardio, etc.), mal funcionamiento neuronal y orgánico, desnutrición, anemia, obesidad, hipertensión, daños renal y hepático, problemas gastrointestinales y digestivos, problemas tiroideos, cáncer, diabetes, artritis, apendicitis, hiperlipidemia, intoxicación, procesos infecciosos o crónicos, contagiosos e inflamatorios, problemas de desarrollo sexual e infertilidad, infecciones de las vías urinarias, problemas de crecimiento, entre muchas otras.
Algunos de los estudios que nos sirven para detectar estas enfermedades son:
Electrolitos séricos
Biometría hemática
Química sanguínea